nunca fueron tan puntuales
El día había llegado. Al fin estaríamos viajando al parque temático más grande de Europa, al Europapark en Rust. A pesar que los chicos y chicas tenían que levantarse a las siete de la mañana para tomar desayuno a las 8 y salir a las 9, nadie llegó tarde a ninguna de estas “citas”. A las 9 en punto salimos y una hora y media más tarde ya pudimos ver desde lejos las enormes montañas rusas que sobresalían en el paisaje. La mayoría aprovecho de recuperar el sueño pedido por la “amanecida”. Apenas llegamos nos dirigimos a la entrada, cada uno recibió su pase con el que podían utilizar todos los juegos mecánicos, los cines 4D, las proyecciones, los diversos shows y mucho más. Solo tenían que pagar el consumo de la comida y para esto había para todos los gustos y de todos los países de la comunidad europea, dividido en pequeñas zonas típicas. Una vez explicado todo esto desaparecieron de un momento a otro y no fueron habidos hasta las 17:30 para poder salir. Según reportaron en el camino al albergue, gozaron el día al máximo, acompañados de un día hermoso con sol. Realmente fue un “highlight” del viaje y contarán mucho tiempo de esta vivencia especial. En la noche cenamos y todos cayeron cansados a la cama.
el registro en el robert koch institut
Un día lluvioso y frío. Nos alegramos por haber cambiado algunos puntos de nuestro programa a días anteriores con más calor. Hoy día nos debía tocar el curso de alemán. Sin embargo, teníamos que realizar también u trámite importante en preparación a nuestra visita a una discoteca en Berlín. Para entrar se exige la documentación alemana de las tres vacunas y este trámite solo lo pueden hacer las farmacias. Por la experiencia del grupo anterior que viajó en enero y febrero de este año, era muy complicado sino imposible encontrar una farmacia dispuesta de invertir el tiempo para emitirnos los registros de cada una de las tres vacunas por persona. (Para cada vacuna se emite una hoja den A4 con un código QR). Esto iba a ser mucho más fácil realizarlo en Bad Herrenalb, por lo cual nos pusimos en marcha y fuimos a la farmacia que nos había confirmado telefónicamente poder realizar esta inscripción. Dejamos todos nuestros datos y aprovechamos para ir a hacer las últimas compras utilizando vales del 10% de rebaja de un supermercado y comer un kebab o una pizza en uno de los establecimientos turcos.
En la noche, después de la cena, tocaba reunirnos por la noche musical en el albergue. Después de cierto silencio e inactividad finalmente se armó una noche de karaoke y baile latinos, que, a pesar de la regla del silencio a partir de las 22:00 horas en los albergues, se siguió con menor intensidad en los cuartos hasta las 03:00 de la mañana. Fue un día muy bonito a pesar de un clima desafiante.
bosque, pintura y parrillada
El día empezó con un levantar muy pesado para algunos, sobre todo aquellos que habían trasnochado, a pesar de contar con temperaturas más amigables. Luego de varios intentos de despertar al grupo finalmente se presentaron todos en el comedor para tomar desayuno. Como siempre el bufet estaba servido a tiempo y cada uno pudo servirse su plato debidamente.
Nos tocaba el paseo con Manfred, vice-alcalde de Bad Herrenalb y durante 36 años guardabosque de esta zona de la Selva Negra. Cada vez que participo de sus enseñanzas me quedo fascinado cuan conectado está con la naturaleza, cuanto sabe sobre los procesos que ocurren en este hábitat, con cuánto amor habla de plantas y animales. Realmente es un placer escucharlo hablar sobre sus experiencias. Es por esto que me dio mucha pena ver a algunos de nuestros estudiantes quienes acompañaron en la caminar sin mostrar ningún tipo de interés y/o respeto, pues se mantenían lejos del grupo, o hablaban durante las presentaciones de Manfred. Esto también les mencioné después del almuerzo preparándolos para las diferentes visitas con guía en Berlín.
En la tarde se presentó una artista de Moldavia que realizó un curso de pintura con acrílico con los chicos tomando como tema principal la montaña de los sietes colores y luego una alpaca de la sierra. Esto se realizó en dos grupos, causó entusiasmo entre algunos y mostró la gran creatividad de otros.
Se acercaba la cena y con ella la última noche en el albergue “Aschenhuette”. Podemos decir que hemos gozado al máximo la experiencia en este hospedaje en medio de la naturaleza, la Selva Negra. Como despedida tuvimos una pequeña parrillada en el patio del albergue. Ya pasaron 5 días desde nuestra llegada.
despedida de bad herrenalb, camino a berlín
Nuestra estadía en Bad Herrenalb había llegado a un fin. Un último desayuno, un aplauso enorme a la gente que nos deleitó con sus artes culinarias y subimos con nuestro equipaje al bus rumbo a la estación de ferrocarril de Karlsruhe, donde abordamos el tren a Berlin. El viaje de aproximadamente cinco horas y media pasó volando como el tren en el paisaje, que hasta con 300 km/h parecía volar. Gracias a la excelente organización de la DJO cada uno contaba con un asiento reservado y pudo viajar cómodamente.
A las 17:30 llegamos a Berlín y fuimos caminando al albergue “Deutsches Jugendhaus am Berliner Hauptbahnhof”. Las 400 camas del albergue estaban todas ocupadas, grupos de jóvenes de toda Alemania y del extranjero estaban alojados en los dos edificios del albergue. Asi también nuestro grupo fue separado en los que ocuparían el edificio 1 y otros en el 2. Aunque también en este albergue rigen las mismas reglas, el cumplimiento es otro, por lo que la bulla en los pasadizos se prolongó por bastante tiempo.